Me remonto a los hechos ocurridos en el pleno de junio. Ante todo decir que estoy en contra de cualquier acto violento ya sea físico y/o verbal, y lo ocurrido fue una respuesta de una persona desesperada a una provocación directa por parte de algunas personas. Una vez en frío, el implicado de los incidentes fue a pedir disculpas personalmente, aparentemente la otra parte también ha rectificado su postura. El intento de hablar en el pleno fue antes de que comenzara el mismo. En otras ocasiones se ha permitido hablar, dado que de momento no se ha decidido modificar el ROM pese a haber presentado firmas suficientes para ello. Se negó esta opción, pese a que todo el conjunto de partidos políticos sabían que se iba a decir porque se les había informado previamente. Aunque por parte del Ayuntamiento sí se había preparado la respuesta a lo que allí se iba decir. Cabe decir que hubo registro a ciertas personas antes de entrar, acto totalmente discriminatorio. En respuesta a las cartas que se han enviado en los dos últimos l’informatiu, donde se ha linchado y criminalizado el movimiento 15M, cabe decir que las personas que firman dichas cartas, casualmente son simpatizantes o miembros de ICV de Santa Perpètua: Jerónimo Pazo (liberado sindical de CCOO del Ayuntamiento),
Francisco Obrero (simpatizante o miembro de ICV de Sta. Perpètua) y Jorge Ferrer (cargo de confianza del Ayuntamiento). ¿Quizá existe algún tipo de interés en criminalizar y desprestigiar un movimiento ciudadano que lo único que lo mueve es ayudar a otras personas en situaciones difíciles, y luchar en contra de todos los recortes que estamos sufriendo? ¿No se parece mucho este hecho a lo que está haciendo el PP del gobierno central contra el 15M, la PAH y demás movimientos ciudadanos equiparándolos a ETA? Mi opinión es que intentan exactamente lo mismo, salvo que estamos ante un partido de izquierdas, y Ada Colau en Santa Perpètua es Iolanda Granados.
M. Dolores Gallego (Can Folguera)14 de juliol de 2013
